FUTBOL SUCIO
por Roberto Perfumo
El mejor valor es no depender de los pitos y jugar
Está claro lo que está pasando”, dijo Diego Cocca. ¿A quién o quiénes se refiere? Es un mensaje difuso y peligroso para el jugador de Racing. Es un extraordinario disparador de fantasmas, excusas o inexplicables motivos. El jugador argentino es especialista en no hacerse cargo de sus errores. Que lo haga el hincha, es parte de su forma de ser pero parece que el jugador toma los fallos como que se actúa para beneficiarlo o perjudicarlo. ¿Conocen algún equipo de los mejores de la historia que lo hayan sido por los árbitros? Barcelona, Santos, Holanda, Argentina 86, Brasil 70, Real Madrid de Di Stéfano, Boca de Bianchi, ni sabían que había un árbitro en cancha.
Es cierto que Racing fue perjudicado en las dos últimas fechas. Duele mucho que haya sido en el clásico con el Rojo. Yo viví ese dolor. En los 60, Humberto Dellacasa, buen tipo y mejor árbitro, nos echó a cinco, les dio un penal; el Chango Cárdenas estaba de arquero y se suspendió por “falta de jugadores” (éramos 6). Otro caso: en cancha de Racing, ellos patearon tres veces un penal (Tarabini) porque Cejas atajó los dos primeros. La herida se reabrió el domingo y cómo viene la persecuta, puede continuar. Por eso, lo más sano es no nombrar al árbitros. Recuerdo el ejemplo que me dio Labruna (1975, River se perfilaba para campeón después de 17 años). Recibí una creíble llamada diciéndome que el juez del inminente River-Boca estaba arreglado. Me desesperé y me fui a casa de Angel. Se lo conté y respondió así: “Es la última vez que usted y yo vamos a hablar de los pitos; haga lo mismo con los jugadores que se lo van a agradecer porque uno es un veterano y tiene que dar ejemplo”. Perdimos el clásico por dormir en un tiro libre de Potente. Después fuimos campeones.
Hay que guardar las banderas, como las de Cocca y los jugadores. Terminar con la lucha política encarnizada, y juntarse para bien del club. Y con que los representantes tienen todos los jugadores y que juegan por eso. Son todos de Racing. Hay que alentarlos y dejarse de joder con los árbitros. Esto empieza por el presidente y el técnico. Jugar contra el árbitro es mortal. Mientras te enojás, te paralizás y el rival te mete el gol mientras esperás que te cobren a favor. No te cobra y te enojás. Lo mejor es jugar al fútbol. Lo peor, estar enojados. Cocca debe seguir y poner en el vestuario este cartelito: “El equipo que depende del árbitro tiene que trabajar aún más”.
por Roberto Perfumo
El mejor valor es no depender de los pitos y jugar
Está claro lo que está pasando”, dijo Diego Cocca. ¿A quién o quiénes se refiere? Es un mensaje difuso y peligroso para el jugador de Racing. Es un extraordinario disparador de fantasmas, excusas o inexplicables motivos. El jugador argentino es especialista en no hacerse cargo de sus errores. Que lo haga el hincha, es parte de su forma de ser pero parece que el jugador toma los fallos como que se actúa para beneficiarlo o perjudicarlo. ¿Conocen algún equipo de los mejores de la historia que lo hayan sido por los árbitros? Barcelona, Santos, Holanda, Argentina 86, Brasil 70, Real Madrid de Di Stéfano, Boca de Bianchi, ni sabían que había un árbitro en cancha.
Es cierto que Racing fue perjudicado en las dos últimas fechas. Duele mucho que haya sido en el clásico con el Rojo. Yo viví ese dolor. En los 60, Humberto Dellacasa, buen tipo y mejor árbitro, nos echó a cinco, les dio un penal; el Chango Cárdenas estaba de arquero y se suspendió por “falta de jugadores” (éramos 6). Otro caso: en cancha de Racing, ellos patearon tres veces un penal (Tarabini) porque Cejas atajó los dos primeros. La herida se reabrió el domingo y cómo viene la persecuta, puede continuar. Por eso, lo más sano es no nombrar al árbitros. Recuerdo el ejemplo que me dio Labruna (1975, River se perfilaba para campeón después de 17 años). Recibí una creíble llamada diciéndome que el juez del inminente River-Boca estaba arreglado. Me desesperé y me fui a casa de Angel. Se lo conté y respondió así: “Es la última vez que usted y yo vamos a hablar de los pitos; haga lo mismo con los jugadores que se lo van a agradecer porque uno es un veterano y tiene que dar ejemplo”. Perdimos el clásico por dormir en un tiro libre de Potente. Después fuimos campeones.
Hay que guardar las banderas, como las de Cocca y los jugadores. Terminar con la lucha política encarnizada, y juntarse para bien del club. Y con que los representantes tienen todos los jugadores y que juegan por eso. Son todos de Racing. Hay que alentarlos y dejarse de joder con los árbitros. Esto empieza por el presidente y el técnico. Jugar contra el árbitro es mortal. Mientras te enojás, te paralizás y el rival te mete el gol mientras esperás que te cobren a favor. No te cobra y te enojás. Lo mejor es jugar al fútbol. Lo peor, estar enojados. Cocca debe seguir y poner en el vestuario este cartelito: “El equipo que depende del árbitro tiene que trabajar aún más”.