Por Matías Fernández (PLANETA RACING)
Con 2 puntos sobre 36 en el Inicial; ninguno sobre seis en la Sudamericana; remates horribles de media, corta y larga distancia; tres o cuatro llegadas al arco promedio durante 90 minutos; 3 goles a favor y 20 en contra en 12 partidos; el peor arranque de un torneo en la historia del club; cinco entrenadores en tres meses...
Está claro que los futbolistas de Racing ya han demostrado, muchas veces, que no están a la altura de las circunstancias y que a muchos de ellos se les acabó el ciclo en la institución. Por eso, el hincha ya no puede ni debe ser tan pasivo. Debe manifestarse, sin violencia, para exigir un presente mejor. Los socios, que pagan $120 por mes de cuota social, tendrán que ser los primeros en ordenar un cambio.
Hay que recordar que hay más de 110 años de historia en juego que no se deben tirar a la basura.Ya se han ido cuatro directores técnicos, el presidente, el vicepresidente primero, el manager, uno de los secretarios, un vocal y uno de los miembros del Tribunal de Conducta. Es evidente que el problema no eran solo ellos, sino también –y fundamentalmente– los jugadores profesionales.
De esta manera, los simpatizantes no deben mantenerse al margen de la cuestión de fondo, sino reclamar: los números del club, los jugadores que están, el mercado de pases, las horas de entrenamiento diarias, si los futbolistas deben cobrar por productividad o no, el estado desastroso de la sede de Villa del Parque, el esclarecimiento del caso Nicolás Pacheco... Hay demasiadas cuestiones para tener en cuenta en este presente de crisis total.
Si los hinchas siguen de esta manera, todo continuará como si nada y terminará con Racing, muy probablemente, en la B Nacional. De hecho, ya está a ocho puntos de All Boys y de Godoy Cruz, que hoy deberían jugar un desempate para saber quién desciende. Y pensar que la Academia había arrancado octavo en el promedio, a dos unidades del séptimo.
