Qué difícil es analizar este partido, no se entiende cómo se escaparon estos 3 puntos, quizás alguno pueda decir, "error de Ischia de sacar a Ibañez", el gol de Lanús vino por ese lado, que estuvo bien custodiado en el primer tiempo por el marcador de punta devenido en carrilero, también podríamos culpar a el hijo de remil puta de Magglio, ya que Velázquez jugó de regalo todo el partido, o podemos culpar a los delanteros, que se erraron fácil 5 goles hechos; la cuestión es que se jugó con otra actitud y por momentos el equipo funcionó bien colectivamente, hubo toques, juego colectivo, llegadas con pelota jugadas por el piso, pocos pelotazos, llegadas claras....pero se perdió, sí, se perdió, empatar con una estación de trén de local, es perder, más para un gigante como Racing, el gusto a la salida de la cancha fué de amargura, porque merecimos ganar holgadamente y terminamos empatando.
Se vieron cambios con la llegada de Ischia, cambios positivos, la actuación de Ibañez como carrilero, la actuación del pibe Gómez, la mejora en el nivel de Pellettieri y los errores de siempre, Cahais cometiendo horrores, Ortíz que parece una tortuga, De Paul, que se pasa de bicicletero, Hauche que no pasa nuca un mano a mano y vive chocando, pero no es para para preocuparse, porque se cambió la actitud, se puso mucho más que los 5 partidos anteriores y el equipo fué al frente, como corresponde a un equipo enorme como Racing, y de local.
No tuvimos suerte en la definición, quizás pecaron de egoístas algunos delanteros cuando la vieron fácil, con un hombre más y con espacios, la cuestión es que "PERDIMOS" 2 puntos y seguimos últimos y se vienen tres partidos dificilícimos, con Boca de Visitante, Newells de local y Belgrano en Córdoba, y estamos cada vez mas cerca de la zona "roja" de los promedios.
Seamos positivos, hoy se vieron cambios tácticos muy interesantes y principalmente de actitud, y seguramente este torneo saquemos los puntos que nos dejen tranquilos con los promedios.
Párrafo aparte con los ladrones, hijos de puta de los dirigentes, que teniendo la posibilidad de hacer un 2013 histórico, se cagaron en el socio y el hincha, priorizaron las peleas internas y las cóimas, e hicieron el peor mercado de pases de la historia.
